Héctor “El Güero” Palma Salazar, uno de los antiguos socios de Joaquín “El Chapo” Guzmán en el Cártel de Sinaloa, será liberado tras casi 28 años de haber estado preso en México y Estados Unidos.
Reportes del periodista Abel Barajas para Reforma detallaron que la magistrada María Dolores Olarte Ruvalcaba, del Primer Tribunal Colegiado de Apelación de Jalisco, ordenó su excarcelación luego de determinar que la Fiscalía General de la República (FGR) no contaba con elementos suficientes para acreditar su responsabilidad en el delito de delincuencia organizada.
La colegiada instruyó que “se realicen las gestiones necesarias con el fin de que se ponga en inmediata libertad a Jesús Héctor Palma Salazar o Héctor Luis Palma Salazar alias ‘El Güero Palma’” en alusión al último juicio que enfrentaba.
Teniendo esto en cuenta, el excapo del Cártel de Sinaloa podría salir del Penal del Altiplano durante las próximas horas. Cabe resaltar que Palma Salazar ya había salido, momentáneamente, de prisión en 2021. La madrugada del 4 de mayo de ese año, el exsocio del “Chapo” abandonó los muros del mismo centro penitenciario en Almoloya de Juárez, pero fue reaprehendido de inmediato por agentes federales para presentarlo ante un juez.
La resolución de la magistrada Olarte Ruvalcaba está relacionada con un amparo que “El Güero” obtuvo a finales de abril de 2023, con el cual se declaró que el juicio en su conta estaba agotado debido a que la FGR no pudo localizar ni presentar a dos testigos protegidos.
Se trata de un empresario sinaloense, de nombre Javier Burgueño Urías —identificado con el nombre clave de “César”— y Marcelo Peña García, a quien se le ubica bajo el pseudónimo de “Julio”. Según los reportes, ambos declararon en contra de Palma en diversas averiguaciones previas, pero nunca como parte de las indagatorias específicas del proceso contra el capo.
Lo acusaron, por ejemplo, de ser el responsable de un cargamento de más de tres toneladas de cocaína que fue asegurado en Tecomán, Colima, en 1999, así como de haber estado detrás del asesinato del subdirector de la Policía Judicial de Nayarit, Antonio Contreras, y su escolta José Cruz Guerrero en mayo de 1995.