Pos no cabe la menor duda de que el Estado quiere darle otra vez atole con el dedo a las y los ciudadanos de Juárez. Ayer las autoridades del estuche de Maru salieron al quite con la ola de críticas recibidas por tanta simulación y fallas en el servicio del transporte público.
Como lo hemos venido escribiendo en este mesmo lugar, el próximo 20 de julio se cumple la fecha fatal para que concesionarios saquen de circulación todas sus unidades que tienen más de 10 años de antigüedad, recordemos que por eso y además sin preguntarle a los usuarios, se les autorizó a los dueños de las chatarras que subieran la tarifa.
Vamos a explicarles a nuestros amables lectores, pues, cómo desde Chihuahua, se pretende engañar a los fronterizos. Resulta y resalta que ayer el secretario de Gobierno, Santiago de la Peña, vino a Juárez y se puso muy sácale punta nomás para verse como si de verdad representara los intereses del pueblo.
Empecemos con el acuerdo establecido en abril de 2023 entre el Estado y concesionarios, en el que se aprobó aumentar la tarifa, y hasta se les dio un plazo de tres meses para renovar sus mugres camiones destartalados que muy apenas pueden rodar.
Pos el Estado vio que eso es imposible y que prácticamente ningún concesionario lo cumplió, y entonces don Santiago le hizo al enojado y dijo que el gobierno no daría marcha atrás y que iba a empezar por la cancelación de 234 concesiones de transporte público, pero no fue claro con los juarenses, porque no les dijo que la mayoría de esas concesiones, pues, ya ni siquiera operan en la ciudad, oséase que dejaron de prestar el servicio, pero pos no se hizo el trámite correspondiente.
La oficina de Transporte de la Zona Norte sabe requeté bien que eso es una tomada de pelo, pues desde finales de 2020, debido a la odiosa pandemia por la que atravesó el mundo y nuestra ciudad, el transporte público se redujo a la mitad. Los concesionarios vieron un mejor negocio con las maquiladoras con las que hicieron muy buenos contratos, por eso ahora hay solo mil 800 unidades del colectivo urbano y más de 4 mil para el traslado de personal.
Entonces, pues, venir a decirle a los juarenses que retirarán 234 concesiones, es una jalada de pelos. Las que se van a cancelar son líneas Circunvalación, Central, 5A, Valle de Juárez, Permisionarios Unidos, 3B y otras que ya ni siquiera tienen camiones en la calle, y lo que van a ver los juarenses a partir del 20 de julio no son camiones más o menos nuevos, como lo prometió el Estado, sino los mismos camiones cochinos, sin placas e igualmente viejos.
Las estadísticas de Transporte Estatal, no se hagan patos, señalan que existen 891 concesiones de transporte público vigentes, de las cuáles solamente 412 están operando, y pos de éstas, apenas 73 unidades prestan el servicio en año-modelo.
Entonces pos es un vil engaño, un engaño más del Gobierno de Maru, que ahora anda diciendo que van a ver el nivel de cumplimiento, eso quiere decir que no saben nada, oseáse, que hubo pura fanfárrea y nadie supervisó si se estaban cumpliendo los acuerdos.
Don Santiago salió con la barrabasada que el colegio de expertos del Consejo Consultivo de Transporte se reunirá dentro de seis meses, oséase, que el 20 de julio ya valió como fecha fatal y el Gobierno del Estado, como no tiene un plan, no se puede poner a las patadas con los mafiosos de los concesionarios, porque si ellos se enojan nomás tantito, paralizan la ciudad completa, entonces, tristemente, los usuarios son los únicos jodidos en este problemón que no se ve por dónde diablos vaya a resolverse.
Ya ni la chispan nuestras autoridades, váyanse al carajo.
Por eso somos los rompenueces.