Pos en una ciudad tan dinámica y en constante crecimiento como Ciudad Juárez, la eficiencia del transporte público no es solo un deseo, sino una necesidad imperante. Recientemente, la Comisión Edilicia de Movilidad realizó un recorrido por el sistema de transporte semimasivo, con el objetivo de identificar puntos de mejora.
Esta inspección, liderada por la regidora Karla Michaeel Escalante Ramírez y el edil Jorge Marcial Bueno Quiroz, dejó en evidencia múltiples deficiencias que, lamentablemente, no deberían existir en un servicio destinado a facilitar la vida de los juarenses.
Esto, pues, se suma a los graves accidentes ocurridos en el último mes que han dejado a varios juarenses muertos, a consecuencia de las irregularidades con las que se trabaja el transporte público en esta frontera.
Y es que el recorrido, que abarcó desde la avenida de El Charro hasta la terminal de la avenida 16 de Septiembre, reveló problemas significativos que afectan la operatividad del sistema. Entre ellos, destaca la dificultad que enfrentan los conductores para girar sobre la calle Melchor Ocampo, un punto crítico que debería haber sido considerado y resuelto en la fase de planificación del sistema.
Resulta y resalta que la falta de señalética auditiva es una omisión imperdonable. En una era donde la accesibilidad debe ser una prioridad, la ausencia de sistemas que permitan a personas ciegas o con debilidad visual identificar las estaciones de ascenso y descenso es una clara muestra de la falta de inclusión en el diseño del transporte.
Esta deficiencia no solo refleja una falta de previsión, sino también una carencia de sensibilidad hacia una parte vital de nuestra comunidad.
Otro punto alarmante es la higiene de las unidades. Si bien es cierto que las unidades son cómodas y el recorrido resulta efectivo, la limpieza deficiente de algunas unidades es inaceptable.
Un transporte público, dijeron los regidores, debe ser un reflejo del respeto hacia sus usuarios, y la falta de mantenimiento adecuado pone en duda el compromiso de las autoridades con la calidad del servicio.
Es evidente que la implementación de este sistema de transporte fue llevada a cabo de manera apresurada y sin una planificación exhaustiva por parte del Gobierno del Estado. La participación de los integrantes del transporte semimasivo y de los organismos de la sociedad civil en el recorrido organizado por la Comisión Edilicia de Movilidad es un paso en la dirección correcta, pero no debe quedarse en buenas intenciones.
Pos las autoridades locales tienen ahora la responsabilidad de corregir estos errores y asegurar que el transporte público de Juárez esté a la altura de las necesidades de sus ciudadanos. Es esencial que se tomen en cuenta las solicitudes del Consejo de Movilidad, Peatones Heroicos y Villa Integra, no solo como un gesto de buena voluntad, sino como una obligación para mejorar la calidad de vida en nuestra ciudad.
El transporte público eficiente, limpio y accesible es fundamental para una ciudad próspera. Esperamos que estas deficiencias sean atendidas con la urgencia que merecen y que el Municipio de Juárez pueda finalmente ofrecer un servicio que cumpla con las expectativas y necesidades de sus habitantes.
El cambio es posible, pero requiere acción decidida y compromiso real por parte de nuestras autoridades.
Por eso somos los rompenueces.