Redacción
La ONU denunció este lunes el saqueo durante el fin de semana de las oficinas del Programa Mundial de Alimentos (PMA) en Jartum, que se suma a otros episodios similares vistos desde el inicio del actual conflicto en Sudán, publicaron medios internacionales.
“Esta es la última violación de instalaciones humanitarias desde el principio de la crisis, que está en su cuarta semana. La mayoría, si no todas las agencias de Naciones Unidas y nuestros socios humanitarios, se han visto afectados por los saqueos a gran escala”, dijo el portavoz Farhan Haq.
Según Haq, el saqueo del fin de semana tuvo lugar en las oficinas del PMA en la capital, por lo que se perdieron equipos informáticos y otros bienes, pero no comida.
La semana pasada, el PMA informó de que había perdido ya al menos 17 mil toneladas de alimentos en sus almacenes en Sudán como resultado de los saqueos registrados desde el inicio de los combates entre el Ejército sudanés y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR).
El portavoz precisó que el valor de esa comida ascendía a más de 13 millones de dólares y dijo que probablemente las cantidades robadas son aún mayores de las que se han confirmado.
En ese sentido, dijo que el secretario general de la ONU, António Guterres, recuerda a las partes del conflicto que tienen que respetar a los trabajadores humanitarios y a las instalaciones de sus organizaciones y proteger a los civiles y a las infraestructuras públicas.
«Las necesidades de los sudaneses, que están atrapados en una catástrofe humanitaria, deben ser lo primero», insistió Haq, que dijo que se desconoce quienes son los responsables de estos saqueos.
El jefe humanitario de la ONU, Martin Griffiths, llegó este domingo a la ciudad de Yeda, en Arabia Saudí, para tratar la crisis que atraviesa Sudán aprovechando que las partes beligerantes del conflicto han comenzado allí un proceso de diálogo.