En la recta final hacia las elecciones del 2 de junio y ante el inminente y crucial segundo debate presidencial, Xóchitl Gálvez, se empieza a hundir en su mar de palabrerías y ocurrencias que no le han dejado nada bueno.
La prianista llegará al segundo debate desgastada, con una mayoría de mexicanos que ya decidió que votará por Claudia Sheinbaum, y sabe que ya no hay nada que hacer, pero tratará de terminar la campaña lo mejor que se pueda.
Lo que se observa en esta última parte de la elección presidencial es a medios de comunicación nacionales en una misma línea, resaltando la violencia, aunque ya estén aceptando por medio de la publicación de encuestas, que la elección está definida.
Ayer, la candidata de Morena, fiel al perfil del presidente Andrés Manuel López Obrador, prometió sacar de la pobreza extrema a 7.5 millones de mexicanos en seis años; es decir, para el 2030.
Y es que durante la presentación de su eje de gobierno “Derechos sociales, bienestar y reducción de la desigualdad” desde Tuxpan, Veracruz, la morenista explicó que esa meta la logrará al dar continuidad a programas sociales instalados en el actual gobierno, más otros que creará y que han sido la bandera de su campaña electoral.
Entre ellos, mencionó el apoyo mensual a mujeres de 60 a 64 años con la mitad de la pensión a adultos mayores, la beca universal a estudiantes de escuelas públicas, de preescolar a secundaria; la creación del sistema nacional de cuidados con atención prioritaria a trabajadoras de la maquila, jornaleras agrícolas y empleadas en la pesca, el aumento del salario mínimo y la garantía de la seguridad social.
“Hablamos de una acción combinada, desde acceso a la educación, acceso a la salud, acceso a la vivienda y también los programas sociales que estamos planteando que serán convertidos en derechos, porque son universales, y el propio desarrollo económico del país. La idea es que no haya pobreza extrema en nuestro país y si no disminuirla de manera sustantiva (…) Estamos hablando de 7.5 millones de personas’’, explicó.
El máximo logro del gobierno de la cuarta transformación, pues, fue la reducción de la pobreza y la desigualdad en el país, algo que no ocurría en México desde hace 40 años y que ningún presidente había podido conseguir.
A nivel local, por cierto, ya empezó el show de las descalificaciones de los perdedores, contra quien va en primer lugar en las encuestas a la presidencia municipal, Cruz Pérez Cuéllar. Mientras se dan hasta con los trastes, nosotros le deseamos un bonito fin de semana.
Nos vemos el próximo lunes, en este su espacio favorito de Redes Ciudadanas.
Por eso somos los rompenueces.
