Pos ayer salió la flamante titular de la Secretaría de Educación y Deporte, doña Sandra Elena Gutiérrez Fierro, conocida en Palacio de Gobierno como la solapadora de todas las transotas que se hacen en el sistema estatal con uniformes y contratos exclusivos del Cobach, para decir que le andaba poniendo al camello en la zona de la Sierra de Chihuahua.
Mandó a citar a los reporteros para decirles que la SEyD ha invertido 86 millones de pesos 426 mil pesos en materia educativa en varias comunidades de la región y pos que esa cantidad la utilizó para hacer obras de infraestructura, becas, equipamiento, y materiales didáctivos y de limpieza para los planteles que hay en aquellos bellos territorios, lamentablemente, controlados por el narco desde hace muchos años.
No hay nada extraordinario en esa inversión, pues, más allá de que le hayan puesto “Juntos por la Sierra Tarahumara” a lo que ya se venía haciendo, no hay nada para presumir de verdad, es puro hacer como que están haciendo mucho, pero pos es más de lo mesmo, oséase, es puritita apariencia.
La información que Gutiérrez Fierro presentó ayer, pues, se da en un contexto en el que se acaba de cumplir un año del asesinato de dos sacerdotes jesuitas y de un guía turístico, es información chamagosa nomás pa llamar la atención.
Otro que ansina anduvo en esa sintonía fue el pirruris del secretario de Seguridad Pública Estatal, Gilberto Loya Chávez, quien se colgó todas las medallitas que tienen que ver con la desarticulación de la estructura criminal de José Portillo Gil, alias “El Chueco”, quien mató a los sacerdotes, y pos que tenía bien compradas las corporaciones policíacas.
Pos Loya dijo que han sido detenidas 37 personas ligadas a esa organización de malandros, pero pos no dijo que casi todos los arrestos fueron gracias a la inteligencia del Ejército Mexicano, pues. Sabemos que este jefe de la SSPE es puro choro, especialista en poner de cara de robachicos, lavar cocos y mantener al estado siempre en vilo gracias a la ineptitud que se carga, y pos su único logro, es que Chihuahua siga en el top tres de los estados más violentos del país.
Se le ocurrió asegurar ayer, que Cerocahui, a un año de la tragedia, es totalmente distinto a como era antes, y pues que ahora ya se veían los niños jugando en las calles y que los establecimientos comerciales operan sin problemas, así ve el funcionario desde la capirucha a esa comunidad.
El señor Loya o finge demencia o le quiere dar atole con el dedo al pueblo, porque en las últimas semanas se ha visto cómo en varias partes de la Sierra, la malandrada se ha dado vuelo y hasta dejó una iglesia llena de agujeros después de un enfrentamiento con armas, de esas que les dicen de alto poder.
Así transcurre el gobierno de Maru Campos o Maru Moches, pasa el tiempo y no hay ni obras, ni soluciones y lo único que presenta son encuestas pagadotas en la que según ella y sus huestes de Comunicación Social, la mandataria es la chipocluda del estado, y pos lo único que se la pasa presumiendo es el sistema Centinela, con el que ella y sus mas cercanos colaboradores están haciendo el negociazo de sus vidas, especialmente con la torre Cenicienta de Juárez.
Por eso somos los rompenueces.
