Pos hoy vamos a escribir de cómo en la política las apariencias engañan y tal es el caso de Adriana Terrazas, quien nunca ha dejado de ser prianista-duartista y eso se le nota a leguas, lo saben aquí y en China, pues. Desde que tomó protesta como presidenta del Congreso local, en agosto de 2022, ha sido una fiel comparsa de Maru Moches, también conocida como la gobernadora Maru Campos.
Cuando el diputado panista Saúl Mireles Corral presentó en agosto del año pasado el punto de acuerdo que contenía la integración de la Mesa Directiva del Segundo Año de Ejercicio Legislativo, sabía que su fracción había metido un gol de portería a portería, ya que el sucio enjuague legislativo tuvo como fin que se quedara alguien que no fuera una piedrita en los zapatos de Maru, y no pudieron elegir alguien más que Adriana Terrazas, porque la presidencia del Congreso correspondía a un integrante del grupo parlamentario de Morena.
Los prianistas no quisieron colocar en ese cargo a un morenista de verdad, porque se complicarían algunas iniciativas tejidas en Palacio de Gobierno, las transas, pues. Adriana Terrazas empezó con sus deslealtades demasiado rápido, ya que cabildeó entre los propios morenistas a favor de la Torre Centinela y el nombramiento del nuevo fiscal estatal, César Jáuregui, que hasta ahora no ha servido para nada.
En enero de 2023, Terrazas pidió a los diputados de Morena no adelantarse y otorgar un voto de confianza a las propuestas de la gobernadora en materia de seguridad y procuración de justicia, una vaciladota, pues. Doña Adriana, una priista disfrazada de morenista a la que el partido guinda no le tiene la más mínima confianza, ha sido tan cercana a Duarte, preso por corruptazo, que en febrero de 2023, que ya siendo presidenta del Congreso abogó por el exgobernador y anduvo empujando para que modificara la medida cautelar y prisión domiciliaria, así de descaradas susacciones.
En las mafias todos los favores se pagan y ahora Terrazas, aunque usted no lo crea, estimada lectora, querido lector, está a punto de reelegirse como presidenta del Congreso y pos para eso se montó todo un plan contenido en la iniciativa de reformas a la Ley Orgánica del Poder Legislativo, que fue presentada el lunes pasado por José Alfredo Chávez Madrid, coordinador del grupo parlamentario del PAN, uno de los títeres de Maru Moches en el Congreso.
Resulta y resalta que se quiere cambiar el Artículo 67 de la Ley Orgánica y el cambio propuesto indica textualmente: “Los integrantes de la Mesa Directiva durarán en sus funciones un año y podrán ser reelectos”, y pues en esto los diputados se pusieron a chambear y pos en menos de 48 horas aprobaron el dictamen.
Con estos cambios el duartismo con vestido de Maru mantendría el secuestro de los tres poderes del Estado. Nada más descarado que esto se haya hecho, pues, a unos días de que termine el periodo de Terrazas, que es el 31 de agosto, es otra mañosada de Palacio de Gobierno.
Terrazas ha sido muy hábil para meterse hasta las entrañas de Morena, pese a un pasado negro en el que, entre otras cosas, pues, en 2014 fue separada de la Dirección de Desarrollo Social de Ciudad Juárez por utilizar recursos en tareas del PRI y pos nunca fue sancionada. Doña Adriana fue dirigente del PRI en Juárez entre 2011 y 2013, era tanta su admiración por Duarte que en ese tiempo, por su decisión, el edificio que alberga al tricolor se nombro oficialmente como “César Duarte Jáquez”.
Así como ahora Maru Campos premiará a Terrazas, César Duarte la premió en 2015 con una diputación estatal y luego con la coordinación de la campaña de Enrique Serrano para gobernador en 2016. A Morena, que no usó sus filtros, Adriana llegó en 2021 por la vía plurinominal y pos nadie sospechaba entonces que en el Multiverso duartista de Maru Moches y su Liga de la Injusticia fuera a cambiarse de bando.
Por eso somos los rompenueces.