En febrero, el módulo Odiseo se embarcará en una misión histórica hacia la Luna, marcando el primer alunizaje de Estados Unidos desde Apolo 17 en 1972 y representando un nuevo esfuerzo de empresas privadas tras el reciente intento fallido del Peregrine en enero pasado.
La IM-1, la próxima misión de la compañía Intuitive Machines, despegará a bordo de un cohete Falcon 9 de SpaceX desde el centro de Florida, con una ventana de lanzamiento programada para la madrugada del próximo miércoles. Sin embargo, el éxito del despegue estará sujeto tanto a condiciones meteorológicas favorables como a pruebas previas exitosas, indica EFE.
Intuitive Machines ha declarado que la IM-1 tiene como objetivo establecer una plataforma rentable para transportar instrumentos científicos de la NASA y carga comercial a la Luna, allanando el camino para una presencia humana sostenible en el satélite natural y sus alrededores.
La NASA, en una teleconferencia reciente, destacó que el propósito de esta misión es prepararse para el programa Artemis, utilizando módulos de aterrizaje lunar desarrollados por la industria comercial. Aunque estas son misiones comerciales, la agencia está comprometida a desarrollar una economía lunar en colaboración con el sector privado para llevar a cabo sus investigaciones en la superficie lunar.
El lanzamiento del módulo de aterrizaje lunar Odiseo está programado para la madrugada de mañana miércoles 14 de febrero desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA, con la expectativa de aterrizar en la Luna el jueves 22 de febrero.
Esta será la segunda misión del programa Servicios Comerciales de Carga Útil Lunar (CLPS) de la NASA, después del intento fallido del Peregrine en enero pasado.