Aun cuando se han cometido más de 123,000 homicidios dolosos en lo que va de su sexenio, el presidente López Obrador ha rechazado cambiar su estrategia de seguridad.
Ciudad Juárez. – De acuerdo al informe “México: Organizaciones del Crimen Organizado y el Narcotráfico”, elaborado por el Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos, son doce los grupos delictivos que se disputan el control de las principales plazas del territorio mexicano, entre las que destacan el Cartel de Sinaloa y el Cartel de Juárez, ambos con gran influencia en esta frontera.
El informe cita a un reporte del Departamento de Estado de los Estados Unidos que refiere que los grupos del crimen organizado estuvieron implicados en numerosos asesinatos, con impunidad y en ocasiones en connivencia con corruptos federales, estatales, locales y funcionarios de seguridad.
Agrega que las siete organizaciones que por años han sido identificadas como las “dominantes” se han fragmentado, lo que ha generado una mayor violencia en las plazas en las que tienen presencia.
La situación actual de la violencia en México, según el informe, está relacionada con la batalla que sostienen el CJNG (dedicado principalmente a drogas sintéticas como el fentanilo) y el Cártel de Sinaloa, la agrupación más dominante y extensa.
Según un mapa integrado en el informe, el CJNG es dominante en Baja California Sur, Nayarit, Jalisco, Colima y Querétaro. Mientras el Cártel de Sinaloa es dominante en Sinaloa y Durango.
Ambos cárteles están en disputa en entidades como Quintana Roo, Baja California, Sonora y Zacatecas, lo que ha acentuado la violencia en esas entidades. Salvo Chiapas, Campeche y Yucatán, todo el territorio mexicano es dominado por un grupo del crimen organizado o es objeto de una disputa entre organizaciones criminales.
Sobre la actuación del presidente, el informe cuestiona que, a más de tres años, López Obrador haya evitado “acciones policiales a gran escala contra los cárteles”. “Después de tres años en el cargo, López Obrador ha evitado acciones policiales a gran escala contra los cárteles y la cooperación entre Estados Unidos y México en materia de aplicación de la ley ha disminuido”, se lee en el reporte.
México y EU: visiones sin coincidir El crimen organizado y la violencia confrontan a México y Estados Unidos. En los últimos meses desde territorio estadounidense han surgido críticas a la estrategia de seguridad del presidente Andrés Manuel López Obrador. Algunos señalamientos han sido que hay pasividad ante la actuación de los cárteles del narcotráfico, que el crimen controla el 35% del territorio y que hay riesgo de una dictadura criminal sin control.
México y Estados Unidos comparten más de 3,000 kilómetros de frontera, por lo que la seguridad es un asunto que preocupa a ambos países. A Estados Unidos le preocupa el crecimiento de los cárteles mexicanos porque son éstos los responsables del trasiego de sustancias como el fentanilo, una sustancia que mantiene en alerta a esa nación debido a que el consumo en sobredosis causó 106,000 muertes en 2021.
Mientras que a México le preocupa el tráfico de armas que está directamente relacionado con el aumento de la violencia en el país. ¿Qué territorio está en disputa? En marzo de 2021, el general Glen VanHerk, jefe del Comando Norte de Estados Unidos, afirmó que entre 30 y 35% del territorio de México está controlado por el crimen organizado.
‘Narcotráfico, migración, tráfico humano, todos son síntomas de las organizaciones criminales transnacionales que operan con regularidad en áreas sin gobierno, del 30% al 35% de México, y es lo que está creando algunas de las cosas que enfrentamos en la frontera’, afirmó el militar.
‘La ingobernabilidad’ que generan esos grupos de crimen organizado, la comparó el general con lo que sucede en Rusia o China. ‘Crean vulnerabilidades potenciales y oportunidades para actores alrededor del mundo, lo mismo ocurre en áreas sin gobierno e inestables con fallas potenciales de gobierno que China, Rusia y otras naciones aprovechan para explotar.
Esto ocurre aquí en nuestro propio vecindario, en nuestro hemisferio’, afirmó. El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó lo dicho por el general. ‘No es cierto lo que se sostiene, pero respetamos las opiniones de todos; nosotros vamos a seguir teniendo buenas relaciones con el gobierno de Estados Unidos, no nos vamos a pelear con Estados Unidos’, dijo al ser cuestionado sobre el tema.
La ‘pasividad’ ante el crimen Otra de las críticas desde Estados Unidos vino en palabras del exembajador Cristopher Landau. En una reunión que sostuvo con miembros del Consejo de Embajadores Estadounidenses en abril de 2021, el diplomático criticó la actitud que el presidente de México había mostrado en sus primeros meses de gobierno.
“Ha adoptado básicamente una actitud de laissez fair (dejar hacer) ante los cárteles, lo cual es obviamente problemático para nuestro gobierno. Es un gran problema para México”, aseguró en una conferencia de prensa.
El exembajador incluso criticó uno de los episodios más polémicos que tuvo el presidente con miembros del crimen organizado: la liberación de Ovidio Guzmán, hijo del narcotraficante mexicano Joaquín Guzmán Loera. ‘Dejó ir a Ovidio Guzmán porque no quería tener un derramamiento de sangre más generalizado en Culiacán.
Fue simplemente un momento terrible. La verdad es que el Ejército mexicano fue superado en armas’, comentó.
La cesión del territorio al narco también de parte de legisladores en Estados Unidos ha surgido críticas. Marco Rubio acusó al presidente López Obrador de tener nexos con el narcotráfico. A través de sus redes sociales, el legislador aprovechó el mensaje para expresar su beneplácito por la decisión del presidente mexicano de no acudir a la Cumbre de las Américas, para vincular a López Obrador con el crimen.
“Me alegra ver que el presidente mexicano, que ha entregado secciones de su país a los cárteles de droga y es un apologista de la tiranía en Cuba, un dictador asesino en Nicaragua y de un narcotraficante en Venezuela no estará en EE.UU. esta semana”, escribió. AMLO: ‘La violencia no está generalizada’ El presidente Andrés Manuel López Obrador ha defendido lo hecho por su gobierno en materia de seguridad y ha asegurado que la violencia no es generalizada. “No es generalizado, no es lo que dicen los de las agencias estadounidenses de que el 30 por ciento del territorio está dominado por el crimen organizado en México, no es cierto, lo podemos probar.
Hay estados donde no hay homicidios, la mitad de los estados no tienen un problema de violencia que se refleje en homicidios; y de la otra mitad, son ocho o 10 estados en donde tenemos en el caso de homicidios más problemas”, defendió el presidente.
Aun cuando se han cometido más de 123,000 homicidios dolosos en lo que va de su sexenio, el presidente ha rechazado cambiar su estrategia de seguridad, la cual está enfocada en atender las causas que generan violencia (a través de programas sociales).