Pos no sabemos si es por puro show mediáticos para causar lástima de los jueces, o estrategia legal avalada por los duartistas en el Gobierno del Estado, que son muchos, empezando por la gobernadora Maru Campos, pero las visitas al hospital del exgobernador César Duarte se han vuelto el pan de cada día desde que está en prisión.
Lo que sí sabemos, es que su defensa, quiere que su cliente reciba arraigo domiciliario y pareciera que siguen en esa estrategia, pues este domingo tuvo que ser evaluado por personal médico del penal de Aquiles Serdán porque supuestamente presentaba presión alta.
Don César ha asegurado desde mediados de 2022, cuando fue deportado, que padecía de casi todolo que podía imaginarse, además de dolores de espalda, hipertensión y hasta problemas del corazón. Algunos de los presos que son sus compañeros se han de preguntar por qué el Gobierno lo tiene tan chiple y sobre todo se han de cuestionar si los gastos particulares corren por cuenta de los chihuahuenses, o de la cartera del exmandatario.
Por cierto, en una de las ocasiones, aunque usted no lo crea, estimada lectora, querido lector, don César dijo en una ocasión que ya no tenía dinero para pagar, como si le fuéramos a creer, pero así se la gastan a veces algunos políticos del PRIAN.
LOS BERRINCHES DE ABBOT
Desde que inició el fenómeno migratorio, pues, nuestra ciudad se ha visto afectada ante la falta de recursos suficientes para hacerle frente al broncón social, pues como sabemos, miles se quedan en la ciudad a la espera de cruzar en busca del asilo político.
En estos años los juarenses han visto tragedias como la muerte de los 40 indocumentados en el incendio del INM, familias atropelladas, migrantes secuestrados y otros tantos asesinados.
Pero Juárez también se ha visto afectada en las exportaciones, por los berrinches del gobernador de Texas, Greg Abbot, cuando fue cerrado el Puente Libre a las mercancías, lo que generó un cuello de botella durante meses en los demás cruces internacionales.
Por ahora dos cosas más se le van a sumar a la carga, pues, ya que ayer Abbott firmó la controvertida ley SB4, que permitirá a la policía estatal y local detener a los inmigrantes que se crea, pues, se encuentren ilegalmente en el estado y concede a los jueces estatales el poder de ordenarles que regresen a México, oséase que veremos a más mexicanos y extranjeros batallando en nuestras calles.
Esta nueva ley entrará en 2024, pero desde hace algunas horas ya el gobierno del otro lado comenzó a meter presión, con el cierre del paso al tren, ya que concentrará a los migras en la atención a los indocumentados que tratan de ingresar a su territorio. Pos esto quiere decir que suspenderá temporalmente las operaciones en los puentes del cruce ferroviario tanto en El Paso como Eagle Pass.
Por eso somos los rompenueces.